lunes, 8 de julio de 2013

ESTE JUEVES.....HISTORIAS BAJO LAS PINCELADAS





     Me he permitido transgredir "un poquito" la consigna de este jueves ya que hice este relato para un curso de relato erótico y al ver la consigna  "juevera" me pareció que podría valer.


                                                                SU DIOS

  Cada día lo veía dos horas. Él ni siquiera de percataba de su presencia, subido en su pedestal miraba al frente con la cabeza alta, orgulloso de su cuerpo y sabedor del deseo que provocaba. Ella lo miraba, deseaba que esos brazos fuertes y torneados rodearan su cuerpo, tocar, apretar, amasar sus glúteos duros y bien definidos. Imaginaba su miembro erecto dentro de ella, se preguntaba  cómo sería sentir el empuje de un cuerpo así, con las proporciones perfectas, todo músculo, terso, suave, sin notar  la masa blanda y gelatinosa que caía sobre ella cuando hacía el amor con su marido. Sentada en una esquina, observaba a la gente pasar y quedarse maravillada por la belleza de ese cuerpo.

   Hoy era el día, había cambiado el turno con una compañera para hacer el último. Cuando llegó la hora de cerrar el museo y la sala se desalojó, Lucía tapó la cámara de seguridad con su chaqueta y acercó su silla al pedestal. Su respiración estaba acelerada, el peligro de ser descubierta la excitaba aún más, su cuerpo temblaba  y su sexo estaba húmedo y caliente.   Mirando hacia los lados se desabrochó el pantalón  y comenzó a masturbarse con una mano  mientras se apretaba a su dios y  tocaba el cuerpo duro y frío de la estatua de Apolo.
                           

        

22 comentarios:

Anónimo dijo...

Cualquier locura es posible si de satisfacer una atracción sexual como la que nos describes, se trata.
Un abrazo.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Fue a partir de una pintura, así que para mí esta bien. Muy provocativo y bien escrito.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

pobre mujer la de tu relato! jejeje...se la ve muy necesitada!...además, si bien la estatuo se ve muy "tentadora" en cuanto proporciones de musculatura y rasgos generales, hay otros "detalles" del Apolo que -al menos por lo que se ve de lejos- resultan precisamente, demasiado "menores" como para erotizar! jajaja...pero bueno, para todo hay gustos! ajjajaa
Un abrazo y gracias por sumarte1

Esilleviana dijo...

La atracción y el deseo tiene este punto irracional y salvaje.

un saludo :)

Anónimo dijo...

Ya se sabe, el deseo no será ciego (evidentemente) pero sí inconsciente... Pobre!

Auxi Gonzalce dijo...

Ay qué penica la pobre... Es como la versión femenina de Pigmalión, pero a lo bestia... Buen relato.
Un saludo.

Fabián Madrid dijo...

Una nueva forma de erotismo, el exhibicionismo y una versión de necrofilia. Muy bueno.
Un beso.

Tracy dijo...

Apolo por fin ha encontrado el ardor de una mujer de carne y hueso.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Ahora que lo pienso, merecía algo más que una estatua. Si se parece a la mujer del cuadro, merecía una verdadera aparición del dios.

Gaby* dijo...

Mucha sensualidad y ardor... A veces, las fantasías se despiertan donde menos lo esperamos y con quien menos podemos pensar. Me ha pasado al leerte... me imaginé a un hombre de carne y hueso despertando su apetito insatisfecho, pero no! Seguro que es mérito de el escultor, plasmar una obra que genere tal atracción!
Besos.
Gaby*

Cristina Piñar dijo...

Vaya fantasías tenía esta mujer ¿no? Bueno, cada cual disfrute cómo quiera o cómo pueda. Buen relato. Un beso.

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Una buena fantasía. Es que esas esculturas tan perfectas es lo que tienen, a veces se comparan, y salen ganando; sin embargo ya se sabe, no hay competencia posible, es un Dios.
Un abrazo

Juan Carlos Celorio dijo...

Buen relato, así alcanza a disfrutar de su fantasía.
Con permiso, se me ocurre algún final de cuento fantástico, p.ej. la estatua se convierte en hombre real, que es lo que era antes que la escultora (aunque tuviera nombre masculino, lo esculpió una mujer) lo transformara en estatua dado que él no se interesaba por ella.
O a lo mejor era un sapo y ¡vaya susto la pobre protagonista!
Besos.

Leonor dijo...

Ya se sabe que el sexo se alimenta del pensamiento, cada cual tiene sus fantasías.
Me ha gustado tu forma de narrarlo, es erótico, que es lo que tratabas de hacer.

Un beso.
Leonor

San dijo...

De la piel a la piedra, se ve que solo hay un paso, bueno en este caso algo más.
Muy lograda esa sensación de desamor y casi asco, que mantiene la protagonista con su pareja.
Un abrazo.

Sindel Avefénix dijo...

Cada uno con sus gustos y sus fantasías!!! Es una historia muy sensual y erótica que está redactada de una manera que despierta sentidos.
Muy original!!!
Un beso.

LAO dijo...

¡pobre mujer enferma y carenciada! Me hace recordar aquello de SOBRE GUSTOS NO HAY NADA ESCRITO Charo......

LAO dijo...

para serte honesto Charo, me has decepcionado con este escrito el que ha pesar de ser una persona normal , tu relato solamente me produzco asco y un profundo interrogante acerca de como es que desperdicias la hermosa vida en hablar de estos desvíos enfermizos de esta manera; siendo que tal vez eres capaz de transmitir mejores mensajes......TE SALUDO CON UN GRAN RESPETO!!

Cecy dijo...

La señora no se quedo solo con la fantasía, la sacio sensualmente, casi sin temor a que la hallen.
Que situación si así fuera, esa es otra historia.


Un abrazo :)

Lucía m.escribanoblogsport.com dijo...

Creo que no acabo de comprender que alguien prefiera la frialdad de la piedra, al calor de un ser humano...Quiza tu protagonista tenia algún problema para relacionarse con los hombres...He sentido pena de sus carencias.
Besos guapa.

Charo dijo...

Lao, respeto mucho tu opinión, pero se trata de un relato y yo escribo sobre todos los temas.Siento haberte decepcionado, espero que eso no implique que no me vayas a leer más...por supuesto acepto todas las críticas pero te aseguro que soy una persona muy normal. Un saludo

Anónimo dijo...

beautiful blog kisses albert