TÍTULO:
EL OTRO LADO
AUTOR:
CARLOS NAVAS MARTÍNEZ-MÁRQUEZ
AÑO DE
PUBLICACIÓN: 2018
EDITORIAL:
AUTOPUBLICADO
GÉNERO:
TERROR
SOBRE EL AUTOR:
Carlos
Navas Martínez-Márquez nace en Madrid un 28 de Febrero de 1974, aunque su
sangre y andadura profesional se reparten entre Madrid, Las Palmas de Gran
Canaria y Málaga, donde reside y trabaja actualmente. Es licenciado en Ciencias
Empresariales por la Universidad de Málaga, así como administrador de "La Web del
Terror", una página de Facebook con contenidos relacionados con el terror,
la fantasía y el género fantástico en general.
RESUMEN:
En Lost Signal, el pueblo más aislado del condado de Maryland,
oscurece antes que en cualquier otra zona de Norteamérica.
Las
leyendas de los lugareños aseguran que muchos de sus habitantes perdieron la
cordura en los últimos años, hastiados por la soledad, las
largas distancias y la dificultad para las comunicaciones, aunque todavía quedan atisbos de lucidez entre los 23 habitantes que actualmente
viven allí.
Corinna
Sanders y Jeffrey Logan establecen un extraño lazo de amistad que les lleva
hasta una recóndita casa en lo más profundo del bosque, una construcción forestal con un pasado
realmente perturbador. El interior de la casa parece albergar un juego psicológico que ambos quieren llevar demasiado lejos. Pero Corinna ha
descubierto que salir de las oscuras dependencias de Fairmont Creek no va a ser
el único de sus problemas.
El
cuerpo de River Ville, un hombre fallecido en extrañas circunstancias, completa
un puzzle sobrecogedor en el que ninguna de las piezas encaja, aunque todo
parece estar inquietantemente relacionado.
OPINIÓN
PERSONAL
Cuando una novela de un autor
desconocido te impacta de manera positiva por su originalidad, como fue mi caso
con la primera obra de Carlos Navas (LA ÚLTIMA HABITACIÓN ) y este autor te envía su segunda novela para que le des
tu opinión, indudablemente no puedes decir que no. Por eso, a pesar de haber
decidido no volver a hacer ninguna reseña “por encargo” no pude resistir la
tentación de decir que sí.
“El
otro lado” no tiene nada que ver con “La
última habitación” aunque el autor vuelve a utilizar algunos recursos
bastante efectivos como son las transcripciones exactas de conversaciones
telefónicas o de walkies-talkies, informes policiales y médicos, mapas,
dibujos, esquemas....que aportan a la trama la
frescura, inmediatez y dinamismo
que pierde en algunos momentos en que el estilo narrativo tradicional en
tercera persona la hace más lenta y
enredada.
A la aclaración del argumento de la
novela, que pudiera resultar confuso por la complejidad de los temas que trata,
contribuye también la forma en que está estructurada: trece partes (divididas a
su vez en capítulos cortos), tres epílogos y dos anexos, además de una nota de
advertencia del autor que, en mi opinión, resulta innecesaria porque no hay
realmente ninguna escena que por su especial crudeza pueda herir la sensibilidad
de nadie, aunque esto, claro está, depende de cada uno.
En cambio los epílogos me parecen muy
acertados porque: en el primero, tres días después, nos ayuda a aclarar y
relacionar todos los cabos sueltos; en el segundo, una semana después,
complementa la historia con las páginas de los periódicos The Baltimore Sun y
The Washington Pots que aportan verosimilitud, y un guiño a la anterior
novela con la transcripción de una
llamada que nos remite a los hechos ocurridos en “La última habitación” ; y en
el tercero, un mes después, nos presenta una situación inquietante.
Destacaría también el anexo gráfico con los
excelentes dibujos de los lugares donde se desarrolla la acción, a cargo de
Javier Bocadulce Carrero, que seguramente se apreciarán mejor en la edición en
papel, y el colofón con el audio del
programa de Cuarto Millenium donde se abordan los misterios de la novela
como si fueran hechos reales.
Como resumen final diré que Carlos Navas ha
cumplido mis expectativas con su segundo libro creando una trama entretenida,
con las dosis adecuadas de intriga y misterio pero sin llegar a la originalidad
y la intrigante acción de La última
habitación.