Vuelvo de nuevo a esta reunión de amigos animada por la convocatoria de Tere en su blog PUNTOS SUSPENSIVOS que tiene como tema "Así empezó todo".Si queréis leer todos los relatos solo tenéis que pinchar en el enlace.
Así empezó todo, con un flechazo
en una página de contactos. Ella lo devolvió segura de que la cosa quedaría ahí
como tantas otras veces, sin embargo, él inició una conversación. Al día siguiente se dieron
los teléfonos y continuaron por wassap. Para ella era el hombre perfecto, alto,
guapo, atento, con un trabajo creativo y que tenía sus mismos gustos. Estaba
segura de que en cualquier momento él desaparecería como había sucedido otras
veces, cuando ya se iba ilusionando. Sin embargo, no lo hizo.
El día de la cita esperaba encontrarse a
alguien muy diferente al de las fotos, y así fue, pero para mejor. En persona
era todavía más maravilloso de lo que se
había imaginado y supo que se había vuelto a enamorar después de unos duros
años tras el divorcio. A los dos meses él se instaló en su casa. Ella se sentía
muy afortunada por tener a un hombre como él a su lado, no se sentía digna,
pero él era encantador y a todas horas le demostraba que estaba enamorado. A
ella no le importó hacerse cargo de todos los gastos cuando lo despidieron de
su trabajo, tampoco le importó prestarle sus ahorros para que pudiera establecerse
por su cuenta. Después de todo, estaban enamorados.
Un día volvió a casa y se dio cuenta de que
se había llevado todas sus cosas., Buscó alguna nota, alguna explicación, pero
no encontró nada. Su teléfono le contestó con un mensaje que ese número ya no existía.
No conocía a ningún amigo y le había dicho que no tenía familia. Estuvo una
semana pensando que volvería y se lo explicaría todo. Nunca lo hizo.
Un año después vio su foto en los
informativos de la televisión. Ella había sido una de tantas a las que el
hombre del que se había enamorado perdidamente había estafado. Podía haberse
deprimido y no haber superado el golpe, pero no lo hizo. Luchó, consiguió que
fuera juzgado y que acabara en la cárcel.
Y así terminó todo.