jueves, 9 de abril de 2020

DIARIO DE UNA CUARENTENA (DÍA VEINTISÉIS)


   Otro día más de trabajo que pasa sin grandes incidentes, de momento. Cuando he llegado a Jefatura de Servicios para firmar y he cogido una mascarilla desechable el Jefe de Servicios me ha dicho que me tiene que durar mucho, que el subdirector médico estaba preocupado porque quedaban muy pocas y no sabía si podrían conseguir más. Hoy es festivo en Madrid, por lo tanto además del poco movimiento que hay ahora, en oficinas no había nadie trabajando, así que todas las oficinas para mí solita. Desde que empezó el estado de alarma trabajan la mitad de la oficina un día y la mitad otro. En este trabajo no se puede teletrabajar y en las oficinas no se puede guardar la distancia de seguridad recomendada y tampoco hay compartimentos o mamparas para diferenciar el espacio de cada uno. 
   Precisamente una compañera de la oficina de gestión nos ha dicho que en su pueblo (tengo que preguntarle cómo se llama cuando la vea) hay una asociación que está haciendo mascarillas de tela para donar a la Guardia Civil, Policía y Hospitales, pero que se han enterado de  que los Funcionarios de Prisiones también estamos escasos y la próxima remesa será para nosotros. Mi compañera nos ha pedido que si tenemos sábanas, camisetas de algodón, cordones, gomas...se las dejemos encima de su mesa y ella se encargará de hacérselas llegar a la asociación. 
  Hoy ha habido una libertad y un ingreso así que nos quedamos como estábamos, con 1200 internos. Por cierto, he visto que los ordenanzas llevaban mascarillas de tela y al ingreso también le han puesto una. Tengo que preguntarles mañana de dónde las han sacado. 

   Me acabo de enterar de que en la prisión de Ocaña I, que está aquí cerca pero pertenece a Toledo, ha habido un plante de los internos y han quemado papeleras y cubos de basura. Se quejaban de que había poca asistencia médica. Están nerviosos y es muy normal. La cosa no ha llegado a más porque los funcionarios han podido sofocar los incendios y los ánimos. Esperemos que no pase como en Italia, que hubo graves motines en las prisiones...aunque de eso no se habla demasiado. 

3 comentarios:

Albada Dos dijo...

Es que lo de las mascarillas desechables, que tengamos que hacerlas durar suena extraño, a contrasentido. Conozco a bastante gente que van haciendo mascarillas de tela, que igual no serán muy útiles para no contagiarse, pero la menos, si somos sintomáticos no contagiaremos, y serán lavables, por cierto, lo que es bueno.

Un abrazo y a por este día

Tracy dijo...

¿Si son desechables, cómo te van a pedir que las hagas durar?

José Antonio López Rastoll dijo...

La solidaridad de la gente haciendo mascarillas, fabricando respiradores o donando dinero desde el deporte me parece el milagro de esta pandemia.

Un abrazo.