martes, 25 de junio de 2013

ESTE JUEVES.....EL CANDIDATO


 

                                              EL CANDIDATO
   Hoy es un día especial para L.E.L.O. Sus compañeros lo han propuesto como candidato a la medalla “Santo Ángel Custodio “ que concede la revista HÉROES tanto a las Fuerzas de Seguridad del Estado como a ciudadanos anónimos que arriesgando su vida han salvado la de otras personas.
   Mientras el presentador del acto de entrega realiza la introducción al fallo, L.E.L.O. , sentado junto a sus compañeros que en el trabajo se mofaban de él, sonríe para sus adentros pensando en la reacción que tendrían si supieran que su heroicidad no fue más que el resultado de una serie de desastrosas y desdichadas coincidencias  que comenzaron con una indisposición estomacal que le hizo abandonar su trabajo para irse a  casa preso de una diarrea incontenible, pasando por la tremenda conmoción y vergüenza de escuchar a su mujer poniéndole los cuernos en su propia cama mientras él permanecía anclado a la taza del váter del baño  retorciéndose entre agudos retortijones y que finalizaron con el tropiezo con sus propios cordones en el andén de la estación de metro que lo hizo caer a la vía  en el momento justo en el que una mujer se desmayaba y caía también a la misma cuando  el tren asomaba ya por el túnel, viéndose forzado por la presión de los demás viajeros a arrastrar el cuerpo de la mujer hasta ponerlo a salvo.
   Pero mis compañeros nunca lo sabrán, piensa mientras vuelve a la realidad y escucha por los altavoces:

conceder la medalla “Santo Ángel Custodio” a Luis Ernesto León Otero por su arrojo y valor al tirarse a la vía del metro…


                                    


    L.E.L.O es un relato que escribí hace tiempo y que me ha inspirado para hacer el de este jueves, en breve lo publicaré para los que estén interesados en conocer en profundidad la verdadera historia.

   Más candidatos en el blog de JULIANO EL APÓSTATA

martes, 18 de junio de 2013

ESTE JUEVES...CARTAS AL DIRECTOR


                                         

                                          LA PENÚLTIMA PARADA DE VUELTA
   Le escribo esta carta con la esperanza de encontrar entre sus lectores la respuesta a mis preguntas.
  Vivo en una ciudad pequeña y aunque no suelo utilizar el transporte público soy una persona observadora. Hace unos cuatro meses, al pasar con mi coche por una avenida larga y recta, observé que estaban poniendo una moderna marquesina para esperar el autobús en la penúltima parada del recorrido de vuelta. Me extrañó porque donde verdaderamente hay siempre gente esperando es en el otro lado de la avenida, que corresponde a la segunda parada de la ruta de ida. Ingenua de mí, pensé que quizá habría alguna razón para empezar por la penúltima y no por la segunda, aunque no acertaba a comprenderla. Pasaron los días y terminaron la marquesina; quedó preciosa, con sus paredes de cristal, su techo rojo, su zona para minusválidos, sus asientos de diseño, pero sin gente que esperara allí.
   Cada día que pasaba con mi coche, esperaba ansiosa que hubieran comenzado las obras de la marquesina de la segunda parada de ida donde la gente sufría el viento, el frío o la lluvia, pero ese día nunca llegaba. Por fin una mañana vi como un par de obreros empezaban a ensanchar la acera de la segunda parada de ida. Ya está, pensé, esa era la razón, primero tenían que ensanchar la acera y después pondrían mi ansiada marquesina. Pero no, mi estupefacción llegó al máximo cuando los obreros terminaron el ensanche y pasaron los días, las semanas y los meses y mi esperada marquesina no llegaba. Ahora que ha llegado el verano, la marquesina de la penúltima parada de vuelta permanece en la acera, majestuosa pero triste porque nadie espera en sus asientos a salvo del sol, mientras del otro lado de la avenida, la gente se apiña de pie bajo la pequeña sombra de un arbolito esperando  el autobús de ida.

  ¿Es que nadie se ha dado cuenta del desaguisado? ¿Es que ningún usuario de esta parada se ha quejado de esta chapuza? ¿Es que los obreros se equivocaron de acera? ¿Es que soy yo la torpe y hay una razón obvia que se me escapa?
                                         



Más cartas al director en el periódico BRISA DE VENUS 

domingo, 16 de junio de 2013

UNA COLABORACIÓN MUY ESPECIAL



   Hoy tengo el placer de presentar un relato precioso de un amigo que tal vez dentro de poco se una a nosotros.
                               

POR UN PAJARITO
Cogimos el primer tren de la mañana sin imaginar lo que ocurriría. La cara somnolienta de siempre y el mismo ritual. Alguna vez nos habíamos sentado el uno frente al otro. No la conocía de nada pero la deseaba. Mirábamos cómo el sol salía por el horizonte. En la siguiente parada, entre los viajeros, entró volando un pajarito. Se movía rápido y le seguíamos con la mirada. El animalito nos hizo intercambiar una sonrisa. Parece un petirrojo, dije yo. Parece más un herrerillo, dijo ella. En la siguiente parada el pajarito se marchó. Nos encanta recordarlo.


Alberto Villares.

martes, 11 de junio de 2013

ESTE JUEVES.......EL SECRETO QUE NO TE LLEVARÁS A LA TUMBA




                                        GUSANOS
   Ya sé cómo deshacernos de ellos, le dije a mi hijo cuando llegó del colegio.
   -Cómo.
   -Lo mejor es darles una muerte rápida para que no sufran. He pensado en bajarlos a la calle y aplastarlos con una piedra, ¿te parece bien?
   -Sí mamá, es lo mejor. Aunque me da pena, tenemos demasiados y no damos abasto para  darles de comer, comen una bestialidad.
   A la hora de la verdad, decidimos darles otra oportunidad de sobrevivir y dejarlos debajo de una morera, tal vez pudieran subir por el tronco y alcanzar las hojas. Pero cuando al cabo de un par de horas volvimos a echarles un vistazo, contemplamos horrorizados cómo, indefensos, eran atacados y devorados vivos por una multitud de hormigas. Entonces utilizamos la piedra.
   Aquella noche no utilizamos la piedra. Utilizamos algo más sofisticado.
   Éramos jóvenes, independientes, cobrábamos un buen sueldo y vivíamos en un chalet alquilado en el norte de una isla maravillosa. En los días despejados, por la ventana de la cocina veíamos el Teide a lo lejos, majestuoso, y por la del salón la misteriosa isla de la Gomera.
   -¿Alguna vez has probado la maría?, dijo Elena.
   -Pues no, sólo he fumado chocolate en el instituto, pero no me gustó demasiado.
   -La maría es diferente, sólo te da por reír sin parar. ¿Te gustaría probarla? Estamos en casa, no hay ningún problema. Ya verás qué risas nos echamos.
   En aquella época yo estaba ávida de experiencias nuevas de todo tipo y, sobre todo, estaba abducida por mi amiga Elena. De las dos, yo era la más guapa pero ella era todo lo demás: más simpática, más abierta, más desinhibida, más dulce, más sociable, más sensual, más atrevida, hacía nudismo y tenía unas tetas preciosas. Lo único que teníamos en común era una cosa: a las dos nos habían dejado nuestras parejas de muy malas maneras, por eso decidimos irnos a vivir juntas.
   A la tercera calada ya empecé a notar cierto mareíllo agradable. Sentía cómo la boca se me estiraba en una sonrisa continua sin que yo interviniera. De pronto miré a Elena y sólo vi una gran “bemba colorá”, como la de la canción de Celia Cruz, y comencé a cantar:
   “y es que tú tienes la bemba, bemba colorá.
   Colorá, colorá, colorá. Bemba colorá.”
   Y las dos estallamos en unas carcajadas escandalosas, imparables, contagiosas.
   Así estuvimos no sé cuánto tiempo,  hasta que Elena dijo:            
   -Tengo una idea, ¿por qué no bajamos a Mesa de Mar a bañarnos?
   -¿Estás loca? Son las dos de la madrugada, dije sin parar de reír. ¡Vamos!
   - ¿A que tampoco te has bañado nunca desnuda en el  mar por la noche? ¡Tengo tantas cosas que enseñarte!
   Conducía ella. La carretera era muy empinada, en muy mal estado y con curvas muy cerradas hasta llegar a la playa, pero conocíamos el camino, además no había tráfico.
   -¿A que no sabes en que estoy pensando, E-le-ni-ta?
   -Pues no, Cha-ri-to ¿En  qué estás pensando?
  - En los dos gusanos asquerosos que han dejado a dos supertías tan guays como nosotras. 
   - Si, ja ja, dos gusanos con dos gusanitos entre las pier…
   Oímos el golpe antes de ver nada, un golpe sordo, fuerte y seco contra el coche
   -¡Para para para! grité yo. Le hemos dado a algo.
   Seguro que es algún gusano gordo gordo, dijo ella riendo.
   A mí se me había pasado el colocón de repente. Unos metros adelante había un bulto grande, no se veía bien. Me acerqué corriendo mientras Elena permanecía impasible al lado del coche.
   - ¡ Es un hombre, Elena, le hemos dado a un hombre ! ¡Se mueve!
   -Apártate, dijo, y subiendo de nuevo al coche arrancó y volvió a embestirle. Ya está, un gusano menos. ¡Vámonos!
   No sé cómo pudo convencerme de  subirnos otra vez al coche y dejarlo allí tirado.
  Nunca supimos si había muerto o no, nunca hubo consecuencias, nunca volvimos a hablar del tema y nunca he vuelto a fumar maría.

                Encontrarás muchos más secretos en http://galisan33.blogspot.com.es/:                                                        
                                                                                                            




                                                                                           


miércoles, 5 de junio de 2013

ESTE JUEVES....LEYENDAS URBANAS



                   




     Este relato es una versión libre basada en la leyenda urbana de Verónica, una chica aficionada al ocultismo que realizó una invocación a las fuerzas ocultas del otro lado y terminó trágicamente. Se dice que si se repite el nombre de Verónica varias veces delante de un espejo aparecerá un espíritu. En el mundo anglosajón es conocida como la leyenda de Bloody Mary.

                                       AL OTRO LADO DEL ESPEJO

 Esa noche, las tres amigas se habían quedado a dormir en casa de una de ellas aprovechando que sus padres estaban de viaje. Las tres se conocían desde la guardería y ahora en el instituto iban a la misma clase. Estaban consideradas por los demás como bichos raros por su forma de vestir y sus gustos sobre temas esotéricos.
 Llevaban tiempo deseando hacer un experimento para probarse a sí mismas y demostrar la falsedad de la leyenda urbana que circulaba por la red.
   Después de cenar y de tomarse un par de cervezas para darse ánimos, decidieron empezar con los preparativos. Llevaron seis cirios de los que se utilizan en las iglesias a la habitación de los padres donde había un gran espejo de cuerpo entero pegado la pared. Colocaron las velas encendidas en el suelo formando un gran círculo y las tres se desnudaron aunque solo dos se metieron dentro del círculo pues la tercera se encargaría de grabarlo todo para luego colgarlo en you tube. Naturalmente, llevaban antifaces negros para no ser reconocidas. Apagaron todas las luces y con el texto de la invocación sacado de internet comenzaron a decir delante del espejo: ¡In nomine Dei nostri Satanas Luciferi excelsi! ¡En el nombre de Satán, el Señor de la Tierra, el Rey del Mundo, ordeno a las fuerzas de la Oscuridad que viertan sobre Mí su poder Infernal…!
   Acabaron la invocación sin que sucediera nada aparentemente, pero cuando ya estaban dispuestas a dejarlo todo, un humo negro empezó a aparecer en el fondo del espejo y un intenso olor a putrefacción inundó toda la estancia. Las tres se miraron aterradas e instintivamente hicieron la señal de la cruz pero ya nada podía parar la fuerza desatada. Se quedaron paralizadas viendo cómo el humo negro se transformaba en una enorme bestia de ojos ensangrentados y  garras  afiladas como cuchillos que en un instante traspasó el espejo y cercenó de un solo tajo el cuello de las dos chicas encerradas en el círculo mientras la otra intentaba escapar tirando la cámara al suelo. Consiguió llegar hasta la puerta de la habitación donde fue alcanzada por el engendro salido del espejo, con la misma suerte que sus amigas.
   Cuando llegaron sus padres a la mañana siguiente, se encontraron con la casa vacía, la cámara de video rota en la habitación y los restos de la cena en el salón, pero no encontraron ni rastro de las chicas. Si hubieran mirado en el fondo del espejo…


Mas relatos en la mansión de Judith :  http://darklight-judith.blogspot.com.es/