TÍTULO:
EL CAMINO DE BALDOSAS AMARILLAS
AUTOR:
JUAN DE DIOS GARDUÑO
EDITORIAL:
TYRANNOSAURUS BOOKS
AÑO DE
PUBLICACIÓN: 2012
GÉNERO:
TERROR
SOBRE EL AUTOR:
Juan de dios Garduño Cuenca nació en Sevilla. Es conocido
por su obra literaria dedicada al terror, siendo miembro de NOCTE, la Asociación
Española de Escritores de Terror. Otras obras del autor son El caído (2004) y Y pese a todo… (2010, adaptada
al cine con el nombre de Extinción).
Actualmente ha publicado su última novela titulada El hijo del Mississippi.
RESUMEN:
“Las cosas no son fáciles tras la Guerra Civil. Una fría
noche de diciembre, el pequeño Torcuato es obligado a abandonar todo aquello
que ama cuando, debido a un desafortunado incidente, ingresa en un manicomio de
Valladolid. El único lazo que conservará con su pasado será un viejo libro
prestado, “El maravilloso mago de Oz”.
En los siniestros pasillos del psiquiátrico, Torcuato tendrá que hacer frente a
sus propios miedos mientras intenta convivir con los extravagantes inquilinos
que ahora comparten su vida. Pero lo que no sabe nadie es que en lo más
profundo del centro, el mal ha cobrado forma y aguarda a una nueva víctima.”
OPINIÓN PERSONAL:
La primera vez que oí hablar de Juan de Dios Garduño fue
cuando se estrenó la película Extinción, basada en su libro Y pese a todo. Desde ese momento empecé
a oír hablar de él principalmente por las redes sociales, dado que es un
escritor poco conocido para el público en general, aunque no entre los escritores
que se dedican al género del terror o de la ciencia ficción. De hecho yo lo
conocí personalmente en el CyLcon que se celebró en Valladolid en 2015 y desde
entonces tenía ganas de leer algo suyo. Aunque acaba de publicar El hijo del
Mississippi, me apetecía leer El camino de baldosas amarillas no sé por
qué.
En esta novela se mezclan elementos que
pueden ser muy reales, como el abuso de poder con los perdedores por parte de las autoridades después de la
guerra civil, los métodos antiguos y crueles utilizados en los antiguos
manicomios, la corrupción que amparaba a los dirigentes de estos centros y el
abandono de sus internos, con elementos fantásticos como la existencia de un
vampiro en el manicomio.
Está contada en tercera persona, aunque se
intercala con otra en segunda que es la voz que le habla al protagonista
haciéndole dudar sobre si realmente es un asesino o son las circunstancias las
que le han llevado a hacer todo lo que hace.
El estilo es rápido y fluido utilizando un
lenguaje sencillo y coloquial, aunque abusa, en ocasiones, desde mi punto de
vista, del tono interrogativo. El hilo
conductor de la novela, a modo de “trenza dorada”, sin duda es el libro El mago
de Oz ( Lyman Frank Baum), que Torcuato se lleva escondido al manicomio y
al que se aferra como única manera de sobrevivir, estableciendo un paralelismo
entre los personajes de este libro con
los amigos que encuentra en la institución. Así, Dorothy es Agnus, la chica de
la que Torcuato se enamora y por la que está a punto de morir; el león cobarde es David Copperfield cuyo
verdadero nombre es José Luis aunque le gusta que le llamen David desde que
leyó la novela de Dickens; el leñador es Vicente porque está fuerte como él; el
espantapájaros es Rita porque no habla nada y Totó, el perrito, se lo adjudica
Agnus a Torcuato aunque él reniegue de ello.
La historia genera mucha angustia, ansiedad
y rabia por la forma en que tratan al
protagonista, que solo tiene doce años, porque además el autor nos hace creer
que posiblemente esos métodos se utilizaran en aquellos tiempos, y, al fin y al
cabo, corrupción y maldad hay en todos los sitios por lo que resulta creíble. Sin embargo, el elemento fantástico para mi gusto no está del
todo muy bien ensamblado en la otra historia y queda un poco deslavazado e
inconcluso.
Por lo demás, desde luego la novela resulta
muy entretenida y consigue mantener nuestra atención en la experiencia de
Torcuato y sus amigos, con los que el autor consigue que empaticemos y
suframos. A su vez, aunque la novela es ficción, nos puede hacer reflexionar
sobre los métodos utilizados en la posguerra española para tratar a los
enfermos mentales y en general sobre la maldad humana.
Recuerdo la novela "Y pese a todo..." porque lo pasé realmente mal con los personajes que una vez fueron amigos y ya no lo eran. Me metí en su piel. Entendí sus razones. En esta nueva obra que nos traes se reconoce, de nuevo, una historia humana que, poco a poco, deriva hacia el terror y lo espeluznante. La tendremos en cuenta, por supuesto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Como ya digo en la reseña, no quise leer "Y pese a todo..." porque ya había visto la película, aunque seguramente en el libro se entienden mejor las razones de esa enemistad que me llamó la atención.
EliminarDesde luego, yo creo que en esta historia pesa más lo humano que lo terrorífico.
Muchas gracias por volver...ya te echaba de menos.
Un beso
Así da gusto volver, Charo. Otro beso.
EliminarTengo por costumbre huir de los argumentos que se enmarcan durante la guerra, aunque creo que esta vez merecerá la pena hacer una excepción y conocer a este autor del que nunca he leído nada. Tomo buena nota de ambos títulos y su creador.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bueno, el tema de la posguerra se trata solo de respabilón.A mí me pasa también como a ti, que huyo un poco de esos argumentos, pero en este caso lo importante es lo que pasa con Torcuato y sus amigos.
ResponderEliminarGracias por pasarte y comentar.
Un beso
Manicomios,abuso de poder y niños no es una combinación que me agrade ,pero, como siempre, tu opinión me da una guía cuando no sé qué leer.
ResponderEliminarGracias por tus reseñas.
Nauthiz
Gracias a ti Nauthiz por leerme y comentarme siempre! Un beso
EliminarGracias por tu trabajo. Un beso
ResponderEliminarGracias a ti por leerme!Un beso
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¡Podría ser interesante leerlo! Gracias por la reseña Charo.
ResponderEliminar¡Un beso!
Desde luego que sí , Noa. Gracias a ti por leer y comentar.
ResponderEliminarUn beso