Este jueves nos convoca Pikxi en su blog La guarida de las locuras y nos invita a escribir una necrológica, un testamento, una elegía o algo similar sobre nosotros. Tal vez me he desviado un poco del tema porque, obviamente, el personaje de mi relato no soy yo, pero es lo que se me ha ocurrido...y ya es bastante, que últimamente estoy un poco seca de ideas.
Si queréis leer todos los relatos participantes, pinchad en el enlace de arriba.
Si estás leyendo esto es porque estoy
muerta y es posible que me hayas matado tú. Un notario te habrá hecho entrega
de esta carta en los locutorios de la prisión.
Como verás, está fechada hace cinco años. Por aquel entonces yo ya
empezaba a sospechar que esto podría ocurrir algún día, desde que, no sé por
qué, empezaste a beber de aquella manera que te hacía perder el control por
cualquier nimiedad. La primera vez que llegaste a casa borracho y no quise hacer
el amor contigo, me pegaste una bofetada y me dijiste que te habías casado para
follar cuando te diera la gana, y me obligaste a hacerlo. Me acusabas de ser la
culpable de tardar tanto en tener un hijo, y me decías que no valía para nada,
ni siquiera para ser una mujer en condiciones.
Cuando me quedé embarazada de Gabriel, pensé que por fin dejarías de
maltratarme ya que había cumplido tu deseo. Qué equivocada estaba. Solo fue una
tregua que duró hasta que dejé de darle el pecho. Después te buscabas miles de
excusas a cual más estúpida para maltratarme. Decías que lo único que había
hecho bien era haber parido a tu hijo del que decías, orgulloso, que era igual
que tú. Menos mal que, afortunadamente, no es así.
Nunca tuve nada, pues como tú te encargabas de repetirme siempre, salí de
mi casa con una mano delante y otra detrás para casarme contigo. Pues bien, aun así, te dejo como testamento la prueba de paternidad de mi hijo
Gabriel, para que sufras y te reconcomas, lo que te queda de vida, sabiendo que
tú no eres su padre.
Se tenía o se tiene guardada en una venganza, para pegarle en donde más le duele.
ResponderEliminarBien contado tu relato.
Un abrazo
La venganza es un plato que se sirve frío y ella se lo estampó en la cara. Aunque mi duda es ¿Qué fue después de ese niño?. En tu relato has mostrado una realidad que tristemente ocurre a diario.
ResponderEliminarMuchas gracias por participar, creo que tus musas te han susurrado muy bien.
Un saludo.
Qué duro, tan dura como es la realidad que narras. Veo en este relato muchos temas, pero me parece muy interesante como queda el papel del maltratador, cuyo mundo ideal queda desmontado con esta carta.
ResponderEliminarMy bueno, amiga. Besos.
Y que también se lo merecía, el gran macho y su gran cacho.
ResponderEliminarJamás se va recuperar de tan duro golpe su ego. Muy original tu relato, me gusto muchisimo.
Beso.
Una buena venganza!!!
ResponderEliminarSe lo mereció. Pasará rabiando el resto de su asquerosa vida.
ResponderEliminarUn beso
Se lo mereció. Pasará rabiando el resto de su asquerosa vida.
ResponderEliminarUn beso
Esa si que es una venganza en plato frío ... pero bien merecida , tremendo texto duro y desgarrador.
ResponderEliminarUn abrazo .
La venganza es de lo más dura para ese personaje maltratador...mucho odio le va a brotar. El texto es bueno, no vale pensar que edad tendrá el niño y en qué clase de padre va a quedar, uno que maltrataba a la madre mal padre será y más con lo rabioso que se habrá puesto.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Hola! Será que me esperaba una venganza más sádica que me pareció poco lo que tuvo. Aunque me da curiosidad el niño ¿también su padre biológico habrá recibido una carta para hacerse cargo de él o habrá quedado a su suerte y traumado? Que, esto de que el hombre que siempre creyó, era su padre maté a su madre no es algo que vaya a superar u olvidar la criatura.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Dolorosa actualidad la del maltrato y muy bien jugada la última carta de la protagonista.Un gusto imaginar el gesto torcido y agrio empapado de rabia del tirano.
ResponderEliminarUn relato crudo pero con el regusto de ese triunfo de ella que es con el que me quedo. Qué buen final!
Nauthiz
Un mini relato muy actual y con un final brillante y bien escrito.
ResponderEliminarNo lo considero venganza, es un pago justo y merecido para un ser abyecto e indigno.
Besos.
Buena manera de darle lo mínimo que se merece!
ResponderEliminarMuy buen relato.
Un abrazo
Menuda confección no podrá dormir tranquilo el resto de su vida.
ResponderEliminarUfff! Un texto más que duro y de candente actualidad. De hecho pienso que la unica tranquilidad que puede quedarle al niño es saber que ese monstruo no es su padre. Muy bien escrito, besos.
ResponderEliminarPerfecto Charo. Un relato magnífico, bien escrito, y con un final emjemplarizante e inesperado.
ResponderEliminarme ha gustado mucho, mucho. un abrazo amiga.
Pues ahí lo lleva...
ResponderEliminarMuy bueno, Charo :)
Creo que la ultima linea no arregla nada
ResponderEliminarBesos.
Un muy buen relato Charo, justo letra a letra y con un final que sentencia todo lo expuesto .
ResponderEliminarMe ha gusta mucho.
Besos.
La violencia de género es la mayor lacra qu existe, y esta pobre mujer solo se pudo vengar después de muerta.
ResponderEliminarUn abrazo
Muy buenaaaa!! Le dio donde mas le duele..en su "hombría"...Que bien te quedo este relato..besoss
ResponderEliminarLa venganza se sirve en plato frío. Pero incluso el más frío de los hombres tiene debilidad por algo. Con este relato te sales. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn abrazo.