Este jueves nos convoca Mónica en su blog Neogéminis y nos daba varios temas para elegir:
-ENTRE BAMBALINAS
-APUNTES DE UN DELIRANTE
-ENCUENTROS CERCANOS DE ALGÚN TIPO
-LO SÉ, PERO ME LAS INGENIO PARA NEGARLO
-LA VERBORRÁGICA INCONTINENCIA DE LOS NECIOS
Yo he escogido "Apuntes de un delirante". Podéis leer todos los relatos pinchando en en enlace.
Desde
aquel día en que fuimos a buscar setas, supe que dentro de mi marido había otra persona,
bueno, persona o cosa, pero algo. Por fuera todo parecía estar igual, sin
embargo, había algo en su interior que me decía cosas cuando él estaba dormido.
Al principio lo único que hacía era susurrar mi nombre muy bajito: Marisa,
Marisa….
El
primer día que lo escuché me llevé un susto de muerte pues la voz parecía venir
de ultratumba. Mi marido tenía la voz
muy fina, casi como la de una mujer, por eso supe que la voz que salía de su
estómago no era la suya, porque era demasiado ronca. Después, una vez pasada la
extrañeza normal en un caso así, empezamos a hacer amistad y todas las noches
el misterioso personaje que habitaba dentro de mi marido, me contaba con pelos
y señales todo lo que hacía durante el día. Así fue como me enteré de que Pepe,
que así se llamaba mi marido, me engañaba con la farmacéutica del pueblo. A mí
me importaba un bledo que Pepe me engañara con otra, pero precisamente con la
farmacéutica que sabe que yo no la trago…Pero yo no hice lo que hice por que me
engañara Pepe, sino porque me enamoré perdidamente de la voz que habitaba en
sus entrañas.
Se llamaba Uriel y era un príncipe encantado que se había enamorado de mí el día de las setas pero como no podía dejarse ver por ningún humano, se había introducido en forma de niebla por la nariz de Pepe, para así poder estar a mi lado y conocerme. El conjuro que le había hecho la bruja se podía romper si una mujer hacía un gran acto de amor por él, y qué mayor acto de amor que quitar una vida para que nazca otra, pensé yo. Así que aquella noche me decidí y con un gran cuchillo le abrí el vientre a mi marido para que saliera Uriel. Sin duda la bruja se enteró de mis intenciones y celosa de nuestro amor condenó a Uriel a desaparecer, porque por más que busqué y busqué entre los entresijos de mi marido, no encontré ningún príncipe enamorado.
Se llamaba Uriel y era un príncipe encantado que se había enamorado de mí el día de las setas pero como no podía dejarse ver por ningún humano, se había introducido en forma de niebla por la nariz de Pepe, para así poder estar a mi lado y conocerme. El conjuro que le había hecho la bruja se podía romper si una mujer hacía un gran acto de amor por él, y qué mayor acto de amor que quitar una vida para que nazca otra, pensé yo. Así que aquella noche me decidí y con un gran cuchillo le abrí el vientre a mi marido para que saliera Uriel. Sin duda la bruja se enteró de mis intenciones y celosa de nuestro amor condenó a Uriel a desaparecer, porque por más que busqué y busqué entre los entresijos de mi marido, no encontré ningún príncipe enamorado.
¡Gracias Mónica!
jajaja brillante, Charo!...qué buen relato de delirios has armado!... me alegra que hayas podido inspirarte con tanta solvencia y gracia. Me encantó leer tu historia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y gracias por participar.
=)
Realmente DELIRANTE.
ResponderEliminarSi delirante y terrotrífico. Cuanta imaginación Charo. El fiinal es de antologia.
ResponderEliminarFeliz finde.
No será "Viernes 13" pero sí, "Jueves 3"... y esto señoras y señores es verdadero horror, lo demás es puro cuento!
ResponderEliminarExtraordinario Charo!
Un beso.
jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa...que talento mas delirante....y a la vez que boba la tipa!! mato la gallina de los huevos de oro..ajajajja yoi me hubiera quedado con los dos..digo...al menos tenía alguien con quien charlar de noche ajaja besosss...
ResponderEliminarMuy bueno, sinceramente. No sé qué me gustó más, si esa persona metida dentro de otra persona o el final del relato, que ha sido trepidante. Saludos. Pablo.
ResponderEliminar¡Madre de Dios!
ResponderEliminarSe veían las intenciones pero sería por Uriel, por cierto, nombre de ángel, o por la farmacéutica :-)
El final es increíble. No sé yo, pero le veo tintes muy subliminales entre las letras :-)
Un beso.
¡Madre mía! lo que hace la locura, pobre marido. Eso si que es sufrir un verdadero delirio.
ResponderEliminarUn abrazo
ajajajajaja, eres un derroche de imaginación, amiga. El príncipe, las setas y ese amor arrebatador capa de cualquier cosa.
ResponderEliminarUn besazoooooo
Una muestra de maestría narrativa. Oscuridad y violencia, me gustó.
ResponderEliminarTal vez la mujer alucinaba o el tal Uriel no quiso saber nada con una perturbada asesina.
De lo que se salvó la farmaceutica.
Un abrazo.
Qué bueno, creo que esto es tremendismo, lo que cuentas es una burrada, pero por la forma en que lo haces, termino la lectura riéndome abiertamente.
ResponderEliminarBesos.
:-D Me ha encantado tu historia. Tal y como lo cuenta parece incluso razonable que buscase dentro de su marido.
ResponderEliminarUn saludo.
jajajaja, Charo esto sí es un relato delirante, derroche de imaginación y locura. Un beso
ResponderEliminarCharo sos genial! Es un relato excelente, me ha dejado muda! Qué delirio! De esos que llevan a hacer cualquier cosa, en este caso peligrosas para el otro.
ResponderEliminarUn final contundente, te felicito.
Un beso enorme.
Realmente un relato delirante y por querer mas se quedo sin marido y sin Uriel, asi ahora Marisa que busque, que busque....besos.
ResponderEliminarRealmente un relato delirante y por querer mas se quedo sin marido y sin Uriel, asi ahora Marisa que busque, que busque....besos.
ResponderEliminarTienes una pasmosa habilidad para el relato con tintes de misterio y de terror. Dios nos libre de la locura de una mujer similar a tu protagonista. No quisiera tener un Uriel en el estómago. Tal vez el pobre marido ni tan siquiera gozaba de los favores de la farmacéutica. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarGenial Charo, me ha gustado mucho. Ingenio de primera división. Un final que lo recibes divertido, feliz, en él toda la transcendencia está en la forma y a donde te lleva. Nunca escarbar en entrañas ajenas lo disfruté tanto.
ResponderEliminarBesos
"Carta abierta a..." y ahora esto. Se que no eres tú, que es una historia pero me estas asustando.
ResponderEliminarUn microrelato brillante Charo
ResponderEliminarse puede pulir un poco la prosa, pero
la historia hace que eso no se note hacia el lector.
Mil besos y no me extraña que ganaras un premio
en el certamen multipremio
besos sonoros guapetona
Muy bueno,CHARO,delirante y original!
ResponderEliminarNauthiz